Tan pequeños... tan peligrosos

Es gracioso pensar lo insignificante que somos comparado con el mismo todo, pero a pesar de nuestra insignificancia somos capas de crear cosas casi tan hermosas como las que la madre tierra nos a obsequiado, nosotros dimos vida a las mas finas notas en tiempo antiguos y forma a imponentes estructuras y melodiosas obras. Aunque a pesar de nuestra capacidad de encontrar la belleza con nuestras manos y mentes la mayor parte de nosotros elige el camino mas fácil de repudiar a otros y desahogar su frustacion con quienes no pueden o no quieren defenderse, hay es donde perdimos el rumbo, hay es donde nuestras pobres e inocentes almas y compañeras son machadas por los errores que solo el ser humano podría cometer como el animal mas ruin y traicionero, mas venenoso que cualquier serpiente pero puede llegar a ser mas puro que la mas blanca de las nieves, como es cuando recién conocemos el mundo y no nos a manchado aun con la sociedad que nosotros mismos creamos.